La destiladera era un artilugio muy extendido utilizado para filtrar el agua destinada al consumo en las islas. Esta pieza, procedente de La Orotava, está fabricada en madera de tea y consta de dos cuerpos: el superior, donde se coloca la piedra de arenisca porosa, que realiza la función de filtro; y el inferior, donde se encuentra una talla o bernegal que recoge y conserva fresca el agua ya filtrada. Las destiladeras pueden ser de distinto tipo: muebles exentos, como es el caso de ésta, o piezas integradas en la arquitectura de la casa.
Esta pieza se encuentra expuestas al público como parte del mobiliario de uno de los espacios más genuinos y mejor conservados de la Casa de Carta, sede de Valle de Guerra del Museo de Historia y Antropología de Tenerife: la cocina.
«Tras el cristal» surge con la idea de recuperar del olvido aquellas piezas que, en su momento, fueron seleccionadas para formar parte del libro “Tras el cristal. Una visión de los museos del Cabildo de Tenerife”.